XXX
El ser humano se preocupa por su alma o espíritu y cree en su eterna
existencia después de la muerte o reencarnación. Cuánta sandez se ha dicho
alrededor de este simple hecho natural. La verdad es que el alma o espíritu
es solo la esencia vital de la vida, pero cuando la vida culmina, todo
termina.
XXXI
El temor es un engendro de la muerte y la vida es el sentido vital de la
existencia.
XXXII
Cuando el hombre se libera del temor, en él nace la vida en plenitud.
XXXIII
Los seres humanos pasan la vida recreándose con la imagen de la muerte, pero
no se detienen a pensar que la vida es más hermosa que la muerte misma.
XXXIV
Cuando se vive en plenitud es como si mil puertas se abrieran dejando pasar
frescura y bienestar. Entonces nuestro Yo irradia energía prodigándola a
nuestro alrededor. |
XXXV
Amate a ti mismo sobre todas las cosas porque tú eres el sentido de la
existencia y las cosas que están en el universo te pertenecen, porque tú
eres el sentido de la existencia.
XXXVI
El universo evoluciona y tú eres parte de esa evolución, ayuda a que tu
evolución sea más rápida dentro de ti y así te alcanzarás a ti mismo.
XXXVII
“Son muchos los llamados y pocos los elegidos”, dice el precepto, pero ellos
representan los muchos y tú eres el elegido.
XXXVIII
No te tengas miedo, teme a aquellos que con mentiras crean verdades,
subyugan a inocentes o pobres de espíritu y se han sostenido por milenios.
Tú eres verdad y camino, eres la verdad que desaloja la mentira y el
engaño.
XXXIX
En la mente y en el deseo están escondidas las verdaderas pasiones de la
vida. |
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