15_16
   

 

 

 

LO QUE NUNCA LLEGO

 

El hombre esperó la hora redentora

con las manos llenas de rosas

los ojos fijos en el firmamento

su cuerpo purificado en los altares de sed

el ayuno que lo condujo a la muerte

y la hora redentora nunca llegó

 

Sus grandes sacrificios

ilusiones

esperanzas

se tornaron pálidas cuando la gran cúpula celeste

descendió trayendo la muerte cósmica

y la hora redentora nunca llegó

 

El niño esperó en vano el día de los juguetes

el trigo se secó

las rosas se marchitaron

el amor defraudó a los enamorados

y la hora redentora nunca llegó

 

 

NEW YORK CITY

 

La ciudad

vomita cuerpos fúnebres

cerebros automáticos

ahogando mi libertad de hombre

Los neones palidecen en la noche

los semáforos lloran a colores

por la locura de los automóviles

buses

peatones

aglomerados en la calzada inerte

 

La ciudad

escupe a mi espada

su tecnicismo inodoro

defeca en mi alma el progreso en marcha

 

Huyo a la ciudad del silencio

en mi huida golpea mi epidermis

el ruido de la muchedumbre

el frío de las m quinas

el auto automático del banquero

la rata humana que defeca tuercas y tornillos

el autómata fabricante de bombas H

cohetes intercontinentales

cerebros electrónicos

 

15

16

Ir a primera página Retroceder una página Avanzar una página Ir a la última página
Ir a Pg.